Koshirae
Me visto de cobres para que no me veas.
No que te oculte mi espiga,
tras pieles, maderas y algodón.
Es que no quiero que te escapes.
Esos ojos negros de noche
de faro apagado, reflejante
donde se proyectan las horas.
Y el tiempo no es más presente.
Todos los dias como navajas.
Trato que no te hieran.
Lucho, corto y pierdo.
La sangre siempre es tibia.
La sangre siempre es cobre.
Seas la vaina o la guarda.
Sea la hoja y el viento.
El fuego de brasas blancas
y la sal del agua hirviendo.